lunes, 27 de febrero de 2012

INTIMIDAD EN LA VIDA MATRIMONIAL


Por Rabbi Avraham Peretz Friedman
Existe un mandamiento bíblico dirigido hacia el hombre para que tenga relaciones sexuales con su mujer. Esta mitzvá, la mitzvá de oná, es uno de los 613 mandamientos bíblicos. Encontramos en Shemot (21:10): “Él no disminuirá los derechos conyugales de ella”. Sin embargo, no hay ninguna obligación recíproca dirigida a la mujer.
¿Qué conlleva la mitzvá de oná? ¿Qué es lo que debe hacer un marido para cumplir con los requisitos halájicos de esta mitzvá?
Los parámetros de la mitzvá de oná que los Sabios establecieron están diseñados para satisfacer los deseos de la mujer. Podemos ver esto en Devarim 24:5 donde un hombre es absuelto del servicio militar durante el primer año de matrimonio así “estará libre para su hogar por un año y así hará feliz a la mujer que tomó”. El verbo utilizado durante la literatura rabínica para describir el rol del marido en la intimidad con su mujer es “complacer”. (Ver, por ejemplo, Pes. 72b, B.B. 10b, Kalá Rabbati).
Naturalmente, la forma de cumplir con esta mitzvá depende mucho de las necesidades de cada mujer y su personalidad única. Al marido la Torá le exige que estudie, sepa y haga aquello que le brindará placer sexual a su mujer. Este proceso de aprendizaje llevará su tiempo, consideración, devoción, humildad, honestidad y mucho sentido del humor. Conocer los gustos personales de una esposa – en todo sentido, no sólo en la intimidad – es tan importante para el éxito a largo plazo del matrimonio que la Torá le dedicó todo el primer año de matrimonio, liberando al hombre de todo tipo de distracciones, para que lo pueda adquirir.
El momento de la mitzvá oná es cuando la mujer sugiere que está interesada. Hay un momento especial para tener relaciones y esto es la noche de la mikve y el viernes por la noche. Sin embargo, como el propósito de las relaciones es que sea placenteras, estos momentos se pueden omitir ocasionalmente bajo el consentimiento mutuo.
¿Por qué la mitzvá de oná le fue entregada solamente al marido? ¿Por qué no existe ninguna mitzvá similar que recaiga sobre la esposa? Aquí les sugeriremos dos razones:
Respuesta 1. Un marido expresará fácilmente su deseo por tener relaciones íntimas sin ser reservado ni dudarlo; una mujer, en contraste, que tiende a ser más reservada y modesta, no lo hará. Para asegurarse que las necesidades de la mujer no se olvidarán, la Torá le impuso al marido una obligación formal de estar alerta ante cualquier indicación que su mujer haga de tener deseos de intimidad y entregarle esa intimidad. 
Esto es, por supuesto, con la intención de beneficiar a la esposa, no prevenirla de comunicar sus deseos. De acuerdo a esto, en dichos casos, por ejemplo, cuando un marido fracasa en discernir correctamente las señales que le han sido entregadas, una mujer puede expresarle, abierta y modestamente, que quiere tener intimidad con él.
Respuesta 2. Un marido no tiende a necesitar la misma preparación emocional para las relaciones como lo necesita la mujer. La mitzvá de oná, que incluye palabras afectuosas, abrazarse y una cercanía física, asegura que el marido creará la atmósfera que dejará satisfecha a la mujer tanto en sus necesidades emocionales, como en las físicas.
Es un gran crimen negarse a tener relaciones íntimas con una mujer que le ha comunicado a su marido de una manera discreta y modesta sus deseos de obtener su atención, y los rabanim son claros en decir que la culpabilidad es del marido ante tal negligencia y crueldad. De manera similar, está prohibido para una mujer negarse a tener relaciones íntimas con su marido. Sin embargo, esto no significa que cualquier miembro de la pareja debe tener relaciones cuando realmente no se siente con ganas de hacerlo, como por ejemplo, cuando uno de los dos está enfermo. En dicha situación, debe quedar clara la razón por la cuál se quiere posponer la intimidad para que no se tome como un rechazo.
El Rabino Avraham Peretz Friedman es el  Rabino de la congregación Congregation Anshe Chesed en Linden, New Jersey. Él obtuvo un MSDD de la Universidad  Columbia University and Rabbinic ordination from the Rabbi Isaac Elchanan Theological Seminary of Yeshiva University. El Rab Friedman enseño en numerosas yeshivot isrelíes y norteamericanas. Fue Director Ejecutivo del Jewish Learning Experience of Durham NC, Chaplain en la Universidad Duke University por cuatro años,y un capellán en la Federal Correctional Institution in Butner, NC. El Rabino Friedman es un consejero de la Behavioral Science Unit of the Federal Bureau of Investigations. Él es autor de Table for Two (Targum Press, 1992), Spiritual Survival for Law Enforcement (Compass Books, 2005), y Marital Intimacy (Compass Books, 2005).
La reproducción de los contenidos de este curso, para otra cosa que no sea uso personal, está prohibida por la ley judía y por la ley secular. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario