viernes, 9 de marzo de 2012

¿Por Qué no Responden (Los Natzratim) a las Refutaciones Sobre el Shabbat Lunar?


¿Por Qué no Responden (Los Natzratim) a las Refutaciones Sobre el Shabbat Lunar?
Por: Rafael Fuentes
La Torá es clara a este respecto y no buscamos convencer a nadie sobre las concepciones ideológicas que ya se tengan, guardar el Shabbat según la Torá lo indique es una cuestión de percepción y no de inducción.
“El calendario es un sistema que divide al tiempo en días, semanas, meses y años. El Calendario Hebreo, como todo lo nuestro, tiene su base en la Torá, ya desde las primeras palabras de la Torá se nos habla sobre él y se nos especifica que éste depende de lo que el Eterno, bendito sea, creó, es decir las Meorot (Lumbreras).Es tan importante el Calendario que dijo el profeta:”(1)
Yirmiahu 31:35-36 Así dijo el SEÑOR, que da el sol para luz del día, las leyes de la luna...Si estas leyes faltaren delante de mí, dijo el SEÑOR, también la simiente de Israel faltará para no ser nación delante de mí todos los días...
Esta advertencia es clara y escalofriante, El Eterno B”H por medio de Yirmiahu Ha’Navi, señala directamente a los Hijos de Israel que si no guardan sus designios y la relación armónica con los fenómenos naturales de la luna para regir su calendario y violan su Torá  YA NO SERAN SU NACIÓN; pues, al no seguirse el calendario estipulado por El Eterno, indudablemente que se rompen los ciclos, la obediencia y no se están observando debidamente fundamentos esenciales de la Torá como seria guardar todas  las santas convocaciones (Pesaj, Sukot, Shavuot, etc.) en el tiempo estipulado por la Torá… y no solo shabat.
La Torá especifica claramente que son las lumbreras (Meorot) las que determinan los cambios temporales significativos y que estas los señalaran:
B’reshit 1:14 “Y dijo Elohim: Sean lumbreras (Meorot) en la expansión de los cielos para apartar el día y la noche: y sean por señales (Otot), y para las estaciones (Moadim), y para días y año."
No existe otra referencia en la Torá para seguir los cambios calendarios, ni las estaciones, ni las santas convocaciones.
El hecho que la luna hubiese sido “formada” al cuarto día no tiene relevancia significativa, puesto que, aunque fuese creada el “sexto día” o cualquier otro “día”: El Bore Olam indicó que son el único medio para marcar y designar los tiempos que regirán al hombre y no otro:
1- “DÍA Y NOCHE”
2- “que sean SEÑALES”
3- “para ESTACIONES (MOADIM)”
4- “DÍAS” 
5- “AÑO”
No especificó ninguna otra forma para designar fechas calendarios… en otras palabras, el dijo que siguiéramos estas señales para determinar y seguir fechas, pues dice:
“sean en la expansión de los cielos para apartar ‘El DÍA Y LA NOCHE’ (marcar y dar señales del ciclo del día: noche/día), y SEAN POR SEÑALES (Otot), y para las ‘ESTACIONES’ (Moadim), y para ‘DÍAS’ (QUE DÍA ES SHABAT?... SÉPTIMO?... ES UN DÍA?) y el ‘AÑO’ ”.
¿Un cuarto día de “24 horas” o un cuarto periodo de tiempo indefinido?
Hoy sabemos claramente que “el sol” demoró una friolera de 5,000 millones de años en formarse y la luna con la tierra 4,500 millones de años ¿qué día de estos millones de años fue el cuarto? De ninguna forma debe verse este texto en un sentido literalista… es un midrash!
El autor de B’reshit explica desde una perspectiva de comprensión según lo que entiende, en base a los recursos intelectuales que posee en su época y no da un registro integral de todos los sucesos acecidos en la creación, pues es totalmente imposible registrar todos estos sucesos en un texto tan corto y solo se remitió a transmitirnos lo esencial.
Por esta razón el asumir que se tiene una fecha exacta desde el momento de la creación hasta nuestros días no es coherente. Como El B”H sabía que iba ser imposible para el hombre saber esto, el no dijo guíate desde el día que yo hice la creación… para eso dijo “sean las lumbreras”… no las matemáticas!
El tiempo no existía antes de la designación y labor de las lumbreras
El Eterno es intemporal y no se rige por las leyes espacio/físico/tiempo (En el olam rujani/mundo espiritual no existe ni el tiempo ni el espacio), El B”H no se rigió por las leyes que El mismo crea para el hombre (El no es regido por nada y El lo rige todo B”H), por ejemplo crea las especies vegetales en el “tercer evento” (B’reshit 1:11-12) cuando aun no existían elementos esenciales para su existencia (la luz solar, el ciclo del día, las estaciones, etc.) que fueron creadas en el subsiguiente “cuarto evento” y como vimos en el párrafo anterior… esperaron “muchos millones de años” para recibir “luz, lluvia, calor, gravedad” y todo lo demás que requieren para su supervivencia ya que todo esto depende exclusivamente del sol y la luna.
Las leyes relativas de la fisca: el tiempo/espacio son creadas para regirnos a nosotros en el “cuarto evento” de la creación y estas leyes no existían antes de este suceso y así lo estipuló: QUE NOS REGIRÍAMOS POR ESTAS SEÑALES, CAMBIOS Y CICLOS y no por ninguna otra forma que haya inventado el hombre… no por nuestra lógica, no por nuestros razonamientos…
El tiempo lo percibimos por la línea continua de sucesos y no porque es hipotético, sino que existe y se percibe, el continuo movimiento de las cosas nos da la “sensación” de un “movimiento temporal” continuo y nos permite llevar un orden establecido para planificar y establecer eventos futuros, pero solo podemos hacerlo por la percepción de la relación entre el espacio y el tiempo, así el tiempo es determinado por lo que nuestros sentidos distinguen, por eso, la importancia de las señales de las lumbreras para determinarlo con exactitud y en plena armonía con la naturaleza creada por El Eterno B”H… si todo el movimiento en el universo se detuviera… no habría forma de percibir el tiempo!
Señales (Otot)…
Indudablemente que El Eterno hizo para nosotros tan fascinante e infalible sistema y LO PUBLICÓ EN LOS CIELOS para que no tuviera nadie, ni el más indocto e ignorante, alguna excusa y se pudiera determinar de una forma fácil, en que día del año, el mes o la semana se encontraban y así no se violara la Torá.
Ahora… ¿qué señales?
El Sol: puede determinar parte del día y las cuatro estaciones del año, cada una en un ciclo de tres meses, mas no puede el mes ni la semana y no da ninguna señal para determinar “un séptimo día”.
La Luna: Da una señal para determinar el mes (se oculta y aparece) y da señales significativas (facetas/fases lunares), cualquiera persona que se acostumbre a su observación determinará en que día del mes y de la semana se encuentra y así podrá saber cuándo es un SÉPTIMO DIA: Shabbat y todas las otras convocaciones, ella claramente nos muestra cuatro semanas completas de siete días SIN CAMBIO ABSOLUTO ni ninguna alteración temporal, así que el tiempo de su ciclo de traslación alrededor de la tierra, no afecta en lo absoluto esto.
Conclusión: Tehilim/Salmos 104:19 Hizo la luna para las Moadim: El sol conoce su ocaso.
¡Los calendarios que conocemos no son exactos ni se basan en la Torá!
Debido que el ciclo de la luna no es “EXACTO” no se puede confiar en “Calendarios Preestablecidos” (Como hacen algunos grupos judíos rabínicos, mesiánicos y otros que se basan en el ciclo descubierto por el astrólogo griego Metón de Atenas y adoptado por Hillel II) y solo se debe confiar plenamente en LA OBSERVACIÓN DIRECTA DE LA LUNA para determinar fechas, puesto que, aunque sabemos que la luna lleva un ciclo de translación casi perfecto, su visibilidad para determinar las señales (aparición y desaparición) y que establecen el principio y final del mes depende de su posición en relación a la posición de la tierra y el sol. 
“Este problema aparentemente sencillo (para los que siguen los CALENDARIOS PAGANOS para regirse), se complica matemáticamente por dos factores: En primer lugar es imposible determinar las duraciones del mes sinódico en relación al año tropical mediante un número exacto de días entero o fraccionario. Por otro lado hay que tener en cuenta la no constancia de los ciclos astronómicos asociados.
Idénticos problemas presentan el año trópico, afectado por el equinoccio de primavera, y el periodo de revolución sinódica de la Luna, en la que interviene la inclinación y orientación variables de la órbita lunar respecto a la eclíptica.
Por este motivo, la medida de tiempo y el establecimiento de calendarios precisos, que preserven la concordancia entre cómputo civil y periodos de repetición de fenómenos astronómicos, se convierte en uno de los problemas fundamentales para la astronomía de posición.” (2)
“El llamado también período sideral. Tiene una duración de 27.32 días, coincidiendo con el período de rotación. Después de este tiempo, la Luna ha dado una vuelta completa alrededor de la Tierra. Si en el “arranque” la Luna estaba en fase de Luna Nueva, después de una vuelta no volverá a ser Luna Nueva, pues en las casi 4 semanas transcurridas la Tierra también se habrá desplazado alrededor del Sol. La Luna Nueva llegará con un retraso aproximado de 2.2 días con respecto al período de traslación.
La velocidad orbital promedio de la Luna es de 3,683 km/hora, sin embargo, como se traslada en una órbita elíptica, la velocidad de su traslación es variable. Cerca de la Tierra (en el perigeo) su movimiento orbital es más veloz y se pone en evidencia cuando verificamos que su movimiento contra las estrellas del fondo es más apreciable. Lejos de la Tierra (en el apogeo) su velocidad se reduce y su movimiento es menos aparente
Sin embargo, la longitud de cualquier mes sinódico puede variar desde 29,26 hasta 29,80 días debido a los efectos perturbadores de la gravedad del Sol en la órbita excéntrica de la Luna.
El concepto tradicional surge con el ciclo de fase de la luna. El mes sinódico es el período que transcurre entre dos mismas fases consecutivas de la Luna, siendo su duración aproximada de 29,53 días. La causa de las fases de la Luna es que vemos la parte de la Luna que se ilumina por el Sol y ello depende de su posición relativa respecto al Sol (vista desde la Tierra).
Ya que la Tierra gira alrededor del Sol, la Luna tarda un tiempo extra (después de completar un mes sideral) en volver a la misma posición con respecto al Sol. Este periodo más largo se llama sinódico. Debido a las perturbaciones de las órbitas de la Tierra y Luna, el tiempo real entre lunaciones puede variar entre 29,27 y 29,83 días aproximadamente.” (3)
Extracto Condensado de “El Verdadero Shabbat” Por Rafael Fuentes
©Este material puede ser usado siempre y cuando se publique íntegro, sin alteraciones, adulteraciones ni extracciones incluyendo esta sección de copyright.
1)   Calendario Hebreo. Guardando el Shabat (lunar) conforme a la Torá, no de acuerdo a calendarios extranjeros. Autor: Avdiel Ben Oved. 
2)   El Calendario Actual en Occidente y sus Orígenes. Autor: C. Toro y Llaca. Instituto de Astronomía y Geodesia (CSIC-UCM). Facultad de Ciencias Matemáticas. Universidad Complutense de Madrid.

3)   NASA (Nacional Aeronautics and Space Administration) U.S.A.



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